El alto representante también mostró en el Consejo de Seguridad de la ONU gran preocupación por el daño a largo plazo que provocará la pandemia en la economía palestina y la cohesión social, incluidos los impactos en la educación y para las próximas generaciones.
A medida que la pandemia se extiende y sus consecuencias se acumulan, tanto los palestinos como los israelíes están sintiendo los efectos, apuntó.
Por su parte, en la intervención enviada al Consejo de Seguridad, el canciller de la Autoridad Palestina (AP), Riad Malki, convocó a tomar acciones significativas para acabar con la ocupación del Gobierno de Tel Aviv en su tierra y lograr la solución bi-estatal.
“Es absurdo considerar que el derecho de Israel a la seguridad podría justificar la ocupación y la opresión de toda una nación durante décadas, o justificar la denegación de nuestro derecho a la libre determinación y a un Estado soberano e independiente, o justificar la denegación de nuestro propio derecho a la seguridad.”
Algunos afirman que la parte palestina no quiere negociaciones, cuando es Israel quien intenta, sobre el terreno cada día, adelantarse ilegalmente a los diálogos sobre todas las cuestiones relativas al estatuto definitivo de Palestina, observó.
También, dijo Malki, es absurdo afirmar que el obstáculo para la paz es la intransigencia palestina, “cuando nuestras posiciones están en realidad alineadas con el consenso internacional y las resoluciones de este Consejo”.
Pero las posiciones y políticas israelíes están violando flagrantemente el derecho internacional y las resoluciones de las Naciones Unidas, denunció.
No podemos permitir que prevalezca el unilateralismo israelí mientras el mundo sigue pidiendo negociaciones bilaterales, recalcó el canciller palestino, ya es hora de abandonar las recetas fallidas del pasado.
A su entender, no basta con pedir a las partes que negocien, este llamamiento debe ir acompañado de medidas que incentiven el respeto de las obligaciones y disuadan de las acciones unilaterales ilegales.
Tampoco basta con decir que los asentamientos son ilegales, hay que garantizar la rendición de cuentas, la distinción y la no asistencia, subrayó el canciller.
En estos momentos no es suficiente hablar de una solución de dos Estados, enfatizó el titular, sino que esto debe ir acompañado del reconocimiento del Estado de Palestina y el apoyo a su soberanía sobre el territorio ocupado desde 1967, incluida Jerusalén Oriental.
Si bien desde hace 70 años existe un Estado de Israel, la creación y el reconocimiento del Estado palestino es uno de los temas pendientes de más larga data en Naciones Unidas y en el Consejo de Seguridad.
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