La capital llegó a tener en cama hasta siete mil 401 enfermos y en muchos hospitales hubo que poner pacientes en pasillos, camillas, sillas de rueda y todo espacio que se pudiera aprovechar porque una gran parte de los hospitales estaban colapsados.
El gobierno declaró casi permanentemente semáforo rojo y paralizó la economía no esencial, cerró calles y plazas y colocó barreras en el centro capitalino para limitar al máximo posible las aglomeraciones, sin embargo, parecía que nada daba resultado.
Ayer lunes finalmente la curva epidemiológica dobló hacia abajo su punta al reportarse 350 menos casos de hospitalizados que en los nueve días anteriores, y hoy renace la esperanza de que se haya entrado en una tendencia a la baja.
Sheinbaum dijo que, no obstante, es necesario que la ciudadanía contribuya y continúe con el cumplimiento de las medidas sanitarias para poder revertir el repunte que comenzó el pasado diciembre.
Hay una reducción, pero como siempre decimos esto depende de todos, no sólo de la acción del gobierno, sino de que sigamos con las medidas sanitarias para evitar que se propague nuevamente con una mayor velocidad el virus y mantener una reducción en las hospitalizaciones.
En relación con las personas intubadas, actualmente la cifra asciende a mil 835, lo que representa 35 menos que las que se tuvieron 13 días antes, dijo la mandataria.
Podríamos decir que la ciudad ha hecho un gran esfuerzo para disminuir el número de contagios y, por lo tanto, de hospitalizaciones y debemos seguir trabajando entre todos para que realmente sea una tendencia de más largo plazo, agregó.
De acuerdo con las autoridades, el número de casos acumulados de Covid-19 en la ciudad es de 482 mil 472; los activos, 32 mil 780, y las defunciones 29 mil 69.
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