En la agrupación hay médicos, maestros, ingenieros, agrónomos, enfermeros y especialistas en otros muchos terrenos, pertenecientes a distintas generaciones; pero todos tienen el ‘ADN caimanero’, es decir, la impronta de haber vivido y estudiado en aquel archipiélago caribeño, cuya isla mayor (Cuba) parece un caimán en medio del mar Caribe.
Ese ‘ADN caimanero’ constituye un orgullo, la síntesis de un proyecto educacional que permitió a Angola la formación de numerosos cuadros plenos, quienes continúan unidos como hermanos, opinó Francisca del Espíritu Santo, al intervenir hoy en una asamblea de la Asociación.
Este sábado la entidad culminó un proceso de balance de su labor interna, con la entrega formal de los cargos a los nuevos directivos electos el pasado 30 de enero por mayoría de votos.
Para el académico y profesor universitario Manuel Jamba, quien asumió ahora la coordinación de la mesa de la Asamblea General, ningún otro colectivo de estudiantes angoleños formados en el exterior tiene la cohesión de la comunidad de caimaneros, lo que constituye un rasgo distintivo de gran valor.
De manera coincidente, el nuevo presidente de la Asociación, Agostinho Narciso, distinguió el empeño durante décadas ‘de los padres fundadores’ y sus sucesores para mantener el funcionamiento de esa organización no gubermental y los vínculos indelebles con Cuba.
Narciso subrayó la decisión de trabajar con dedicación, escuchando siempre las sugerencias de los demás, pues las opiniones de todos cuentan por igual y merecen idéntico respeto.
En aparte con Prensa Latina, destacó la ‘enorme responsabilidad’ a él confiada, pues la organización está compuesta ‘por profesionales con un poder intelectual muy por encima de la media’ y eso requiere propiciar el diálogo, la inclusión y la participación colectiva para lograr el éxito en cualquier proyecto.
La solidaridad con el pueblo cubano, respondió, ‘es la mejor cosa de nuestra organización, siempre decimos que los caimaneros somos hijos de la misma madre y el mismo padre; decir caimaneros y solidaridad con Cuba son cuestiones indisociables’.
En ese sentido, lo más importante es condenar el bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por el gobierno de Estados Unidos, ‘que dura ya muchos años y ha causado innumerables dificultades’, señaló.
Los caimaneros, afirmó, ‘no podemos dejar de luchar contra el bloqueo, lo sufrimos cuando vivimos allá en Cuba y sabemos todo el daño que hace’.
Al encuentro fueron invitados diplomáticos de la Isla, quienes reconocieron los nexos de cooperación y hermandad entre los pueblos de Angola y Cuba.
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