La construcción de una nueva base en esa isla es un tema que divide al gobierno central de Japón con el de la prefectura de Okinawa, agrega en su edición de este jueves el diario nacional Asahi Shimbun.
El rotativo destaca que hace dos años un referéndum demostró que el 70 por ciento de los votantes estaban en contra del proyecto de construir una nueva base para las tropas de Estados Unidos.
Los isleños ven la instalación de Futenma como un peligro para los lugareños debido a su ubicación en medio de la zona residencial de Ginowan, y a su vez se oponen a la reubicación de la base dentro de la prefectura de la isla.
El gobierno central, basado en un acuerdo con el gobierno de los Estados Unidos, está presionando para trasladar el aeródromo de Futenma para una nueva instalación que se construirá en un vertedero frente a Henoko.
La decisión provocó una fuerte reacción de los habitantes de Okinawa, ya que se cree que muchos restos de los muertos en la guerra todavía están enterrados en el área sur, el lugar de la sangrienta Batalla de Okinawa de 1945.
Seiken Akamine, un legislador del Partido Comunista de Japón, criticó el plan de usar tierra del antiguo campo de batalla y exigió que se descarte como una opción.
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