El responsable de la institución monetaria explicó que la actividad económica de Francia volverá gradualmente a su nivel anterior a la crisis, hasta alcanzarlo en la primavera o el verano de 2022, mientras que en la etapa actual se encuentra al 95 por ciento de la normalidad.
A partir de esos datos Villeroy adelantó ‘un crecimiento de al menos el 5 por ciento’ para 2021, ‘uno de los más fuertes de Europa’ dijo, lo que supondría ‘el mayor repunte de la economía francesa en 50 años’ desde la crisis del petróleo de 1973.
Entre los indicadores que apuntan hacia esa mejoría el gobernador señaló que la inversión y el empleo han resistido durante la crisis sanitaria ‘bastante mejor de lo que se podía temer’, y añadió el fuerte aumento del consumo privado en el tercer trimestre del año anterior.
En la misma línea se expresó también hoy el ministro de Economía, Bruno Le Maire, al asegurar que ‘la economía francesa sorprenderá a la zona euro y al resto de Europa por su capacidad de repuntar de aquí a finales de 2021’, gracias al ‘mantenimiento de la inversión empresarial’ y a la ‘resistencia del mercado laboral’, aseguró.
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