La ministra de Salud, Mai AlKaila, anunció que el lote llegará en los próximos días cuando esperan recibir también bulbos de formulaciones inyectables proporcionadas por la Alianza Mundial para la Vacunación e Inmunización (GAVI).
En semanas previas, la funcionaria recabó apoyo de la Organización de Naciones Unidas (ONU) a fin de ampliar el esquema de vacunación en la bloqueada Franja de Gaza y la igualmente asediada Cisjordania, donde encaran un repunte de las infecciones por el SARS-CoV-2, causante de la grave enfermedad.
Alkaila advirtió sobre una explosión en los contagios tras la detección en esa segunda localidad de la cepa identificada a finales de 2020 en Reino Unido y de la presuntamente hallada en Sudáfrica.
Según el balance más reciente de la cartera, de mediados de marzo a la fecha los especialistas diagnosticaron alrededor de 229 mil casos de Covid-19 en ambas demarcaciones, mientras los decesos suman más de dos mil.
El primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina, Mohammad Shtayyeh, solicitó también la ayuda de la ONU pero con el propósito de implementar un mecanismo de protección para ese pueblo árabe, frente a lo que considera una ola de terror en medio de la pandemia.
En sucesivos mensajes, el dirigente denunció la intensificación de las demoliciones de viviendas en Cisjordania, perpetradas por soldados al servicio de Israel, las cuales dejaron sin techo a decenas de familias en los últimos meses.
Preocupa igualmente la situación de los presos palestinos en cárceles de la potencia ocupante, más de un centenar de ellos contrajeron la Covid-19 en dichos penales, condenaron activistas.
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