Para Jaime Alfaro, quien coordina la recolección de dicho plasma en el hospital pediátrico Benjamín Bloom, entre la población existe la percepción de que este recurso es menos necesario ya, y por ende dona menos.
‘La pandemia no ha terminado, siempre está allí, pero la afluencia de donantes es muy poca’, indicó Alfaro al estatal Diario El Salvador, a propósito del bajón en las reservas de plasma convaleciente.
La ausencia de donantes voluntarios complica el proceso para transfundir con plasma de personas que vencieron a la Covid-19 a pacientes enfermos, pues hay un período específico para aprovechar los anticuerpos creados, agregó.
‘Todos los que crean inmunidad por medio de las vacunas pueden convertirse en donantes’, precisó Alfaro, a propósito de la llegada de los primeros lotes de vacunas AstraZeneca-Oxford para inmunizar a la población.
El Salvador superó ya los 62 mil casos confirmados de Covid-19 desde la irrupción de la pandemia en marzo de 2020, con saldo de mil 950 fallecidos.
ga/cmv