Rodeado de expectativas y después de escuchar recomendaciones del Grupo Científico Asesor Honorario (GACH) y celebrar un excepcional Consejo de Ministros, el gobernante transmitió en rueda de prensa repetidas disposiciones previas.
Como novedad suspendió la obligatoriedad a la asistencia escolar presencial y el cierre completo para enseñanza secundaria a solicitud de intendencias departamentales, inhabilitación de deportes amateurs y clausura de vestuarios en clubes y gimnasios.
Lo completó con el restablecimiento del aforo del 50 por ciento en los autobuses interdepartamentales de pasajeros y un límite hasta 400 espectadores en espectáculos públicos.
Una primera reacción provino del catedrático infectólogo Julio Medina, miembro del GACH, quien consideró tímidas las acciones proyectadas por el primer mandatario en momentos en que un sitio digital especializado situaba a Uruguay a la cabeza de los países de Suramérica con más casos nuevos por millón de habitantes.
Señaló que ‘el precio a pagar en ese camino más largo es más internaciones, más pacientes graves, más secuelas más fallecidos también, obviamente, más estrés a nivel educativo porque lo que se genera alrededor de algún caso positivo es muy intenso’.
A su vez, el opositor Frente Amplio de Uruguay cuestionó por débiles las medidas anunciadas, y entre los senadores Alejandro Sánchez, quien señaló que ‘el gobierno insiste con las mismas débiles herramientas’, y Oscar Andrade señaló la falta de respuesta a los 400 mil trabajadores informales y los 140 mil nuevos pobres golpeados por la pandemia.
En la Cámara Alta se aprobó la extensión por 120 días más de la ley que limita el derecho constitucional a la reunión por alegada amenaza a la salud pública. Esa ley permite la intervención policial en aglomeraciones potencialmente propagadoras del virus SARS-CoV-2 causante de la enfermedad.
La bancada frenteamplista no lo votó por inconstitucional y además porque como expuso Sánchez, las medidas deben apuntar a que ‘los trabajadores con comorbilidades no vayan a trabajar y vayan al seguro de salud’, al igual que los que son contactos de contactos de un caso de Covid-19.
Al final de la semana proseguía la campaña de vacunación inmunológica con dos millones de dosis de las farmacéutica china Sinovac y 100 mil de la estadounidense Pfizer, con concurrencia de población por debajo de las expectativas y continuos colapsos en el sistema digital para agendar turnos.
Entretanto, Uruguay presenta un 35 por ciento de positividad en ola exponencial de contagios y 12 de los 19 departamentos territoriales en zona roja de riesgo.
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