Debemos tener confianza en las instituciones y seguir las instrucciones, explicó Costa al pedir un reforzamiento de las prerrogativas de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, el regulador dentro de la UE).
Igualmente, criticó la falta de integración de competencias dentro del bloque en el área sanitaria.
Aclaró que harán ajustes en el plan de vacunación nacional después que sobrarán algunas dosis de AstraZeneca (que provocó trombosis en casi medio centenar de inmunizados en Europa), lo que llevó a recomendar su no utilización en menores de 30 años de edad (en algunos países 55-60 años).
Sin embargo, manifestó que cumplirá las recomendaciones médicas y se inoculará la segunda dosis del fármaco el próximo 10 de mayo.
Hay que reforzar las competencias de la EMA, expresó tras una visita al teatro Nacional de San Carlos, en compañía de la ministra de Cultura, Graza Fonseca.
Dijo que si las decisiones toman otro camino no tiene sentido la existencia de la agencia europea.
Igualmente, el primer ministro defendió el mantenimiento del proceso de inmunización, porque es la mejor manera de combatir de forma eficaz la enfermedad, provocada por el coronavirus SARS-CoV-2.
En tanto, y como parte de la presidencia portuguesa de la Comisión Europea, la ministra de Salud, Marta Temido, recomendó una reunión de sus homólogos y con la Comisión en la búsqueda de una posición común respecto al fármaco.
Al referirse a la posibilidad de no emplear el medicamento, Temido dijo que eso significaría dejar de vacunar a dos millones de personas.
Portugal llegó la víspera a dos millones de dosis administradas desde el comienzo del proceso el 27 de diciembre del año pasado.
Desde el comienzo de la pandemia murieron aquí unas 16 mil 900 personas de un total de 826 mil infectados.
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