Estudiantes de la Facultad de Medicina y Farmacia de la Universidad Estatal se movilizaron tras el plagio de la profesora Marie Josette Malvoisin, retenida contra su voluntad desde el pasado sábado al salir de la institución.
En la calle Oswald Durand, en el centro de la ciudad, los universitarios montaron barricadas y quemaron neumáticos para exigir su liberación.
Un movimiento similar tuvo lugar en la calle Nazon, en las cercanías del aeropuerto internacional, cuando un grupo de ciudadanos bloquearon las vías de acceso y amenazaron con hacer lo mismo en el Palacio Nacional.
‘No podemos aguantar más esta situación, es demasiado’, dijo uno de los manifestantes en un video trasmitido por redes sociales.
A unos 70 kilómetros al suroeste de Puerto Príncipe, en la comuna de Petit Gôave, los residentes continuaron con una protesta desde la víspera, luego del secuestro del funcionario Wilkens Dicette, al frente de la sección comunal.
La manifestación provocó el cierre de la Ruta Nacional 2, que conecta la capital con cinco departamentos del sur del país.
Al menos 10 personas fueron secuestradas la semana pasada, la mayoría en la capital de Haití, de acuerdo con reportes de la prensa local.
Este lunes la Policía halló el cadáver de la estudiante de enfermería Marline Flora Nérestant, desaparecida desde el jueves último, mientras aún seis de los 10 religiosos raptados el pasado día 11 continúan en manos de sus captores.
‘Todos los días salimos a la calle con miedo de no regresar’, dijo a Prensa Latina, Jean Pierre, quien dirige un pequeño comercio en la calle Panamericane de la capital.
Lamentó que a diferencia de otras crisis, actualmente cualquier persona puede ser víctima, ‘hasta los que no tenemos mucho’, deploró.
La seguridad se deterioró en Haití en los últimos años, y alcanzó niveles alarmantes desde mediados de 2020.
En el primer trimestre del año unas 157 personas fueron plagiadas, el doble de igual periodo en 2020, según el Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos.
La situación también afecta a mujeres y niños, cuyos asesinatos, lesiones, violaciones y secuestros aumentaron un 62 por ciento de septiembre a febrero de este año, de acuerdo con el informe divulgado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
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