Según detalló en un informe, la caída fue más relevante en la división de consumo e incidió en ese resultado la venta en noviembre pasado de su filial Honor a una firma estatal, para garantizar su supervivencia ante las limitaciones de Estados Unidos.
El negocio de las redes mantuvo un ‘crecimiento sostenido’ y la facturación por los derechos intelectuales de patentes arrojó 600 millones de dólares.
Huawei era el segundo proveedor global de teléfonos inteligentes, pero la ofensiva norteamericana junto al añadido de la pandemia de Covid-19 en 2020, golpearon sus ventas.
Las maniobras proteccionistas de Washington implicaron la desaparición del Android, aplicaciones y servicios de Google, así como el cese de tecnología y componentes como los microprocesadores Kirin, claves en la fabricación de los smartphones. Si bien sus directivos avizoran otro año desafiante, precisan que 2021 permitirá avanzar en la estrategia para mantener el liderazgo tecnológico, dotar a los negocios de resiliencia, maximizar el valor de la ultrarrápida 5G y acelerar la 5.5G para soportar diferentes tipos de conexiones.
Otro elemento será la autosuficiencia y pasará por más inversiones en la creación de semiconductores y captar talentos al desarrollo del sistema operativo Harmony OS, dijo recientemente a Prensa Latina Yang Cao, una de las directoras ejecutivas de Huawei.
La idea -acotó- es hacerlo atractivo para los jóvenes y ofrecerles soluciones inteligentes lo mismo en el hogar, la oficina, durante viajes, momentos de recreación o sesiones de entrenamiento.
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