El proyecto, que combina música, danza y materiales reciclados, insta a la integración comunitaria a favor de la naturaleza en un contexto marcado por el incremento de los desechos sólidos y las afectaciones que ello provoca al entorno.
Incluida en la programación de la jornada de cierre del Festival Musical de Segovia, España (25 de julio), la obra ostenta diversos premios internacionales tras su recorrido por escenarios de todo el mundo, por su capacidad de insertar de manera armoniosa elementos diversos.
La presentación en la ciudad española sucederá sin restricciones de edad y con previa inscripción en la página de la cita, mientras el montaje estará a cargo de la propia Beugré junto a la creadora de esa nación europea Aida Colmenero Díaz.
De acuerdo con la convocatoria, podrán intervenir en la representación personas habituadas al trabajo corporal, artístico y creativo, como profesionales del teatro, la danza, el movimiento, performance, entre otros.
Escenografía y vestuario aparecen en la obra realizados con un millar de botellas recicladas, lo cual supone un reto para el bailarín/humanidad, que lucha por salir de esas redes para domar el escenario, espacio que constituye una metáfora del mundo y en el que sonidos, cuerpos y plástico terminarán fusionándose.
Según detalla la página del festival, la preparación y puesta en escena representan un acto de reflexión sobre el uso de los plásticos y su efecto sobre el planeta, para generar conciencia y fomentar acciones por un desarrollo sostenible.
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