La ratificación difundida por medios de prensa se hizó pública dos semanas después del deceso.
Según Iswap, la muerte de Shekau marca un cambio en la insurgencia yihadista en este país, la cual mató a más de 40 mil personas y desplazó a unos dos millones en el nordeste durante la última década.
Aún ninguna fuente de Boko Haram comentó o discrepó sobre la versión de la muerte del jefe terrorista, mientras el ejército nigeriano precisó que continúa las investigaciones al respecto.
‘Shekau prefirió ser humillado en el más allá a serlo en la Tierra. Se suicidó instantáneamente al detonar un explosivo’, dijo en una grabación una voz parecida a la del guía de Iswap, Abu Musab al Barnawi, quien habló en el idioma Kanuri.
Según el audio, Iswap envió combatientes al enclave de Boko Haram en el bosque de Sambisa, que encontraron a Abubakar Shekau sentado en su cabaña y lo involucraron en un tiroteo, del cual se escapó, corrió y vagó durante cinco días.
Los contrincantes siguieron buscándolo y cazándolo antes de que pudieran localizarlo en la zona boscosa y tras hallarlo le instaron a que con sus seguidores le rindiera lealtad a la Provincia del Estado Islámico de África Occidental, pero Shekau rechazó la demanda y se suicidó al estallar la carga explosiva que supuestamente portaba.
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