A pesar de algunos desafíos en diferentes distritos, el proceso electoral realizado hasta ahora es mucho mejor que los anteriores, dijo en un breve intercambio con periodistas el político y militar, quien fuera presidente de Nigeria entre 1999 y 2007.
Cuando vemos de manera general cómo transcurrieron las votaciones, es muy estimulante apreciar la apertura de espacios en el país para la participación popular, pese a desventajas claras y comprensibles, como por ejemplo la pandemia causada por la Covid-19, comentó.
Surgieron, dijo, dificultades de logística, pero las estructuras y ejecutivos de la Junta Nacional Electoral gestionaron con rapidez y efectividad las respuestas a cada uno de los contratiempos, lo que demuestra que la preparación de las elecciones fue razonablemente buena.
Visité decenas de colegios en Addis Abeba. Muchas personas llegaron a votar desde las seis de la mañana, algunos antes, y actuaron con paciencia y disciplina. Incluso los agentes de los partidos están satisfechos y no tienen quejas hasta ahora, explicó.
Los comicios fueron realizados en las jurisdicciones donde no hubo dificultades en el proceso de registro de electores, ni tampoco hay problemas de seguridad.
No participa en los sufragios el Frente de Liberación Popular de Tigray, declarado por el Parlamento como organización terrorista, cuyos líderes realizaron elecciones regionales en septiembre pasado y desafiaron un mandato del Parlamento.
También está inhabilitado el grupo Shene, facción formada dentro del Frente de Liberación Oromo, aunque presuntamente opera de manera autónoma desde 2018, responsable de atentados contra civiles, propiedades privadas e infraestructuras públicas, según informes oficiales.
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