Si bien los esfuerzos en curso para mejorar la situación en la Franja de Gaza deben avanzar rápidamente, no se pueden perder de vista objetivos más amplios, dijo al Consejo de Seguridad de la ONU.
También reafirmó la necesidad de lograr una solución de dos Estados sobre la base de las resoluciones de Naciones Unidas, las leyes y acuerdos bilaterales.
Hastings, quien es además coordinadora residente y humanitaria de la ONU, consideró esencial que Israel implemente medidas adicionales con el fin de permitir la entrada sin obstáculos de asistencia humanitaria a territorio palestino.
Sin la entrada regular y predecible de bienes a Gaza, la respuesta estaría en riesgo, en tanto los medios de vida así como la economía en general se verían afectados, recalcó.
En ese sentido, añadió la diplomática canadiense, la mejora del movimiento y el acceso a territorio palestino ocupado resultan fundamentales para una estabilidad en el área.
Según destacó, el Gobierno de Tel Aviv debería aliviar las restricciones al movimiento de mercancías y personas dentro y fuera de Gaza, con el objetivo de eliminarlas en última instancia.
Aunque persiste la tregua pactada el 21 de mayo tras 11 días de hostilidades y bombardeos de las fuerzas militares de Israel contra Gaza, la situación aún es muy frágil, advirtió.
El daño de esa escalada se estima en cifras de 290 millones y 380 millones de dólares, según una evaluación de la ONU, el Banco Mundial y la Unión Europea, detalló Hastings.
Además, continuó, el sector social de Gaza se vio muy afectado, lo cual debilitó la red de seguridad para los residentes más vulnerables, mientras que la recuperación y reconstrucción inmediata y a corto plazo podría costar hasta 485 millones de dólares.
Hasta el momento, precisó la alta funcionaria, se recaudaron unos 45 millones de dólares de los 95 millones solicitados en el llamamiento urgente humanitario lanzado por Naciones Unidas en mayo pasado.
Este miércoles, el Consejo de Seguridad de ONU dedicó un debate abierto a la situación en el Medio Oriente, incluida la cuestión palestina, y varias representaciones mostraron preocupación ante la demolición de propiedades árabes por parte de la potencia ocupante.
La creación y reconocimiento del Estado palestino es uno de los asuntos pendientes de más larga data en la ONU, si bien desde hace 70 años ya existe un Estado de Israel.
Actualmente, la mayoría de la comunidad internacional coincide en que es Tel Aviv quien debe acabar con la colonización de territorio palestino para avanzar hacia la paz, y que solo una solución biestatal podrá traer estabilidad a la región.
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