Según Dan North, economista senior de la compañía de seguros Euler Hermes North America, lo que se avecina supone un cierto riesgo para el PIB y la previsión de crecimiento en 2021 y quizás en 2022.
Añadió que lo más preocupante ‘no es tanto la enfermedad como la respuesta política’ en medio de la rápida propagación de la variante delta del virus que disparó aquí los
Es poco probable –dijo- que las autoridades vuelvan al tipo de cierre económico visto en 2020, que dio lugar a que más de 22 millones de personas perdieran sus puestos de trabajo.
Pero las restricciones en el número de personas que se permiten en los restaurantes y otros espacios o en los viajes podrían frenar la economía, argumentó.
Las primeras solicitudes de subsidio de desempleo aumentaron la semana pasada tras una serie de descensos constantes, mientras las ventas de viviendas nuevas, por su parte, disminuyeron a un mínimo en 14 meses.
Joel Naroff, presidente de Naroff Economics, afirmó que la mayoría de los economistas han incluido en sus previsiones para 2022 un final de la pandemia (o una limitación de sus efectos).
Esperemos que sea así, pero la pandemia no ha terminado, aunque muchos ciudadanos y políticos actúan como si así fuera, alertó.
A juicio suyo, el mayor riesgo está en el lado de un crecimiento económico más lento el próximo año, ya que la cepa Delta del coronavirus SARS-CoV-2 o futuras variantes podrían mantener la pandemia durante más tiempo del previsto.
El gobierno federal anunció el lunes que mantendría la prohibición de viajar al Reino Unido y otros países, lo que desvanece las esperanzas de un sector aéreo que buscaba un repunte a finales del verano, reportaron medios locales.
Los economistas aguardan por las cifras de crecimiento del segundo trimestre del año, que se espera estén muy por encima del aumento anual del 6,4 por ciento registrado en los primeros tres meses de 2021.
Con más de cinco millones 100 mil casos activos actualmente, la norteña nación registra hasta la fecha casi 35 millones 400 mil enfermos y alrededor de 628 mil decesos, de acuerdo con rastreadores en línea de la pandemia.
Ello significa que Estados Unidos mantiene las peores estadísticas en cuanto a número de contagios y muertes comparado con el resto de los países del mundo.
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