Desde su página en la red social Twitter, la entidad capitalina promotora de la creación artística e intelectual, el patrimonio sociocultural y el conocimiento de los pueblos de América Latina, mencionó también su obra como ensayista y poeta con títulos reconocidos como La fijeza, de 1949 y Dador, de 1960.
La Editorial Esténtor, en México, recordó la fecha con la frase de Lezama: ‘Cuando estás parado parece que estás creciendo, pero hacia dentro, hacia el sueño. Nadie se puede dar cuenta de ese crecimiento’ y reconoció la valía de Paradiso dentro de las piezas esenciales de la narrativa del siglo XX.
Rocío Cerón, poeta y ensayista de la nación azteca, rememoró el 9 de agosto de 1976 con la lectura del poema El pabellón de la vacuidad y la Casa del Libro de México señaló su relevancia como uno de los autores del denominado boom de la literatura hispanoamericana de la década de 1960.
La Universidad de La Habana indicó también su faceta como colaborador de los principales medios de prensa, revistas y espacios culturales en la nación caribeña y la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí señaló que desde 1959 la institución estudia sus propuestas literarias mediante el trabajo bibliográfico.
Lezama es también el creador de Muerte de Narciso, de 1937; Enemigo rumor, de 1941; La expresión americana, de 1957 y Oppiano Licario, de 1977 y, a juicio de los especialistas, su obra incorpora lirismo, metáforas, alusiones y alegorías presentes en textos como Analecta del reloj, de 1953.
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