Hollywood no convirtió en una estrella en Estados Unidos al afamado Bedi, pese a sus películas y series de televisión en el extranjero.
‘Hollywood me devastó, Italia y la India me resucitaron…’, escribió Bedi en sus memorias ‘Historias que debo contar: El viaje emocional de un actor’.
El libro lleva a los lectores a través de los altibajos de su vida profesional y personal, sus relaciones, incluido el matrimonio y el divorcio, y sus emocionantes días en el cine, la televisión y el teatro, en la India, Europa y Hollywood.
Sandokan, el héroe de las novelas del escritor Emilio Salgari, llevó a la fama a Kabir Bedi, cuyas memorias contienen secciones del programa televisivo italiano de 1976.
La miniserie mezcló lo exótico y la acción para ofrecer una apasionante aventura anticolonial con estrenos en italiano, francés, alemán, holandés y español y más de tres décadas después, en 2012, fue doblada al hindi.
Tras aquél éxito cinematográfico, hubo un montón de secuelas como Sandokan se levanta de nuevo (1977), El Retorno de Sandokan (1996) y El hijo de Sandokan (1998), y a Bedi le siguieron otros roles de espadachín como el filme El corsario negro (1976).
Bedy además actuó en cintas como ‘Octopussy’ con Roger Moore como James Bond, ‘Ashanti’ con Michael Caine, ‘El ladrón de Bagdad’ con Roddy McDowall y ‘La bestia de la guerra’, dirigida por Kevin Reynolds.
Entre sus papeles en populares series de televisión figuran ‘The Bold and the Beautiful’, ‘One Life to Live’ y ‘General Hospital’.
En el volumen Bedi menciona cómo dejó su ciudad natal, Nueva Delhi, por culpa de los Beatles, a cuya emblemática banda entrevistó como reportero independiente de All India Radio el 7 de julio de 1966.
Fue una ‘entrevista exclusiva, cara a cara, Beatle a Beatle, durante 30 minutos’, después de mucha persuasión y casi un no de su representante Brian Epstein, explicó al aclamado actor.
Bedi tenía entonces 20 años y tuvo su mayor decepción pues cuando pidió al personal de la radio una copia de la entrevista no pudieron encontrarla, porque habían grabado otros programas sobre la misma cinta.
De sus relaciones amorosas, Bedi cuenta que pasó de una mujer emocionalmente agotadora a otra, sin una pausa entre ellas, lo cual le dejó sin tiempo para sí mismo.
‘La gente puede pensar qué suerte tiene uno por tener una mujer hermosa tras otra, pero sólo yo sé el precio que pagué por ser un hombre impulsivamente emocional’, plasmó Bedi en el texto.
Pese a su estrellato, siempre meditó por qué no le llovían las ofertas. Una vez le preguntó a un director y éste le respondió: ‘áEres Sandokan, Kabir! No podemos pensar en ti como algo más’.
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