Londres dijo el viernes que su misión de evacuación finalizaría en unas horas y que sus fuerzas armadas no podrían sacar en avión a ningún ciudadano afgano que aún no hubiera entrado en el aeropuerto de Kabul, informó este domingo la agencia Ariana.
Por su parte, el ministro de defensa británico, Ben Wallace, estimó que entre 800 y mil 100 afganos que trabajaron con el Reino Unido y eran elegibles para el reasentamiento no saldrían del país por vía aérea, y se comprometió a ayudarlos si podían hacerlo por tierra.
Gran Bretaña estuvo al lado de Washington desde el comienzo de la invasión a Afganistán liderada por Estados Unidos que derrocó al entonces gobernante Talibán en castigo por albergar a los militantes de Al Qaeda tras los ataques del 11 de septiembre de 2001. Londres también suspendió las operaciones de su embajada en Afganistán y enfatizó que cualquier reconocimiento y compromiso con los talibanes debe estar condicionado a que permitan el paso seguro a quienes quieren salir del país, preciso la información de Ariana.
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