Por medio de una conferencia de prensa en formato híbrido, la cual contará con la presencia física de algunos periodistas y otros por plataformas digitales, se espera que el diplomático turco también presente un breve resumen de su liderazgo al frente de la Asamblea durante el último año.
El próximo 20 de septiembre, Bozkir entregará la presidencia del mayor organismo de Naciones Unidas al ministro de Relaciones Exteriores de Maldivas, Abdulla Shahid.
Una de las máximas prioridades del futuro titular de la Asamblea General será la recuperación de la pandemia de Covid-19, como aseguró tras su elección en junio pasado.
Del 20 al 28 de septiembre sesionará el segmento de alto nivel del septuagésimo período de sesiones de la Asamblea, cita que por segunda ocasión estará marcada por la crisis sanitaria.
Aunque tradicionalmente el evento reúne en el edificio de Naciones Unidas, en Nueva York, a cientos de líderes mundiales, la pandemia restringe nuevamente la presencia de jefes de Estado y de Gobierno, aunque algunos ya confirmaron su asistencia a la sede.
El debate general en el cual intervienen los dignatarios dentro del segmento de alto nivel ocurrirá del 21 al 27 de septiembre, bajo estrictos protocolos sanitarios que comprenden el uso de mascarillas en interiores y el distanciamiento físico, entre otros, según un documento aprobado en ONU.
Para limitar el número de personas, el acceso y la presencia en el salón plenario se limitará a cuatro representantes por Estado miembro y Estado observador, incluido el jefe de Estado o de Gobierno.
Igual que en el segmento de alto nivel del año anterior, los líderes internacionales también podrán presentar sus declaraciones de forma pregrabada en video.
Debido a la pandemia de Covid-19, por primera vez en su historia el segmento de alto nivel de la Asamblea General sesionó mayoritariamente de forma virtual en septiembre de 2020 y sin la participación física de cientos de líderes.
En julio de este año, la sede de ONU abrió nuevamente, se levantaron los límites de ocupación diaria y pudieron volver a sus oficinas quienes estaban en teletrabajo.
Pero las máximas autoridades del organismo multilateral advirtieron que ese panorama podría modificarse en dependencia de la situación sanitaria en el país sede, Estados Unidos, y especialmente en la ciudad de Nueva York.
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