Según el ministro de Defensa, Ben Wallace, alrededor de 200 miembros de las fuerzas armadas -entre choferes y ayudantes-saldrán a las calles desde este lunes en camiones cisternas del Ejército.
Mientras la situación se estabiliza, nuestros militares estarán ahí para suplir cualquier falta de personal y ayudar a mantener en marcha al país, afirmó el funcionario.
El déficit de camioneros obligó a varias compañías petroleras a cerrar estaciones de servicio dos semanas atrás, y aunque las autoridades aseguran contar con reservas suficientes de gasolina y diésel, la noticia desató el pánico entre los automovilistas, que comenzaron a hacer filas para rellenar sus depósitos.
La Asociación de Transportistas estima que faltan 100 mil choferes en el Reino Unido, y según sus directivos, el Brexit es culpable de que unos 20 mil de ellos abandonaran el país tras el divorcio con la Unión Europea.
La suspensión de las pruebas de conducción debido a la pandemia de Covid-19 también contribuyó a agravar la escasez de conductores.
Para tratar de solucionar la crisis, que afecta también el suministro de los supermercados y cadenas de comida rápida, el gobierno anunció el fin de semana pasado que otorgará cinco mil visas temporales a camioneros foráneos, e igual cantidad a trabajadores del sector avícola.
Aunque varios ministros, entre ellos el de Salud, Sajid Javid, afirmaron este sábado que la situación ya comenzó a normalizarse, el presidente de la Asociación de Vendedores Minoristas de Gasolina, Brian Madderson, aclaró que en Londres y algunas partes de Inglaterra la crisis empeoró en las últimas horas.
En declaraciones a la emisora Radio 4 de la BBC, el líder gremial celebró el apoyo del Ejército, pero consideró que el despliegue de los militares no será una ‘panacea’ que resolverá el problema a corto plazo.
La víspera, el líder del opositor Partido Laborista, Keir Starmer, alertó que el otorgamiento de las visas temporales podría demorar semanas en implementarse, por lo que instó al primer ministro conservador, Boris Johnson, a convocar de urgencia al Parlamento para legislar sobre el tema, y evitar desabastecimientos durante la Navidad.
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