Arce encabezó el ‘whipalazo’ nacional convocado en defensa de símbolos patrios y de los pueblos originarios, y denunció que nuevamente la derecha golpista y asesina convoca a paros y al maltrato de gente las calles porque lo que no pudieron ganar en las urnas quieren hacerlo a través de grupos mafiosos y criminales.
‘Ayer el pueblo boliviano, sabio como es, nos dio claramente la señal entre parar versus trabajar; el pueblo boliviano decidió trabajar en los nueve departamentos’, dijo el Jefe de Estado refiriéndose al escaso eco que tuvo la convocatoria opositora.
El mandatario también resaltó que los bolivianos empiezan a sentir los resultados de tener un Gobierno del pueblo para el pueblo, ya que la economía y la salud mejoran, y la educación también avanza, y ese es un reclamo popular.
Durante el evento de desagravio a la bandera indígena, Arce aseguró que la wiphala debe ser respetada porque representa a las mayorías en el Estado Plurinacional de Bolivia.
‘Nuestra wiphala nos muestra el camino de la unidad, nos muestra el camino de la resistencia, de la lucha’, aseguró el mandatario en una masiva concentración en el departamento de Cochabamba.
El presidente boliviano expresó que esta lucha de reivindicación de los pueblos originarios manifestada hoy no es más que la lucha por la democracia y el respeto de las mayorías del país. Arce dejó claro que no permitirán los atropellos, el fascismo y el ‘matonaje’ impulsado por sectores protagonistas del golpe de Estado de 2019.
El mandatario lideró junto al vicepresidente David Choquehuanca y otras autoridades gubernamentales los actos de defensa de la whipala convocados en todo el país en el Día de la Descolonización.
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