Según trascendió este miércoles, en el puerto de Felixstowe, por donde se trasiega el 40 por ciento de los contenedores que entran y salen del país, los barcos no pueden descargar por falta de espacio en los patios.
El pico previo a la Navidad, combinado con la escasez de camioneros, la congestión de las terminales terrestres, los incumplimientos en la llegada de los buques y la pandemia de la Covid-19 provocaron un cuello de botella en la rada, aseguró un portavoz de la instalación portuaria ubicada en la costa este de Inglaterra.
Aunque el vocero afirmó que la situación mejora y esta semana habrá más espacio, la naviera danesa Maersk informó que se vio obligada a desviar sus barcos hacia otros muelles en el continente europeo, desde donde los contenedores son trasladados a Reino Unido en embarcaciones más pequeñas.
El ministro sin cartera del Gobierno británico Oliver Dowden intentó, sin embargo, restarle importancia a este nuevo problema, y en declaraciones a la televisora Sky News exhortó a la población a no apurarse en hacer las compras navideñas porque todo se resolverá antes de fin de año.
Confío en que la gente podrá tener sus juguetes para Navidad, apuntó el funcionario, también copresidente del gobernante Partido Conservador.
Dowden dijo que el ejecutivo toma medidas para atajar la crisis, pero agregó que la falta de camioneros es un problema que afecta también a otros países europeos, a Estados Unidos e incluso a China.
Al respecto, resaltó la reciente decisión de crear cinco mil nuevas plazas para entrenar a conductores de camiones de carga y flexibilizar los trámites para obtener la licencia de conducción para ese tipo de vehículo.
Londres también prometió otorgar cinco mil visas temporales a choferes extranjeros, pero hasta ahora menos de un centenar de camioneros respondieron a la oferta.
El déficit, que según la Asociación de Transportistas es de 100 mil conductores, afecta el abastecimiento de combustible a las gasolineras y de productos alimenticios a los supermercados.
Los sectores avícola, cárnico y lácteo también se quejan de afectaciones por falta de choferes y de mano de obra, la mayoría de los cuales abandonaron el Reino Unido luego de que el Brexit puso fin al libre movimiento de personas entre el territorio británico y la Unión Europea.
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