Recientemente, el titular de Naciones Unidas acogió con satisfacción la declaración unilateral de alto el fuego en todo ese territorio, a partir del pasado 15 de octubre, anunciado por el presidente Faustin Archange Touadéra.
Guterres encomió ese paso fundamental que está en consonancia con la hoja de ruta conjunta para la paz en esa nación, aprobada por la Conferencia Internacional sobre la Región de los Grandes Lagos, el 16 de septiembre.
También instó a todas las demás partes a respetar de inmediato ese alto el fuego y renovar los esfuerzos para avanzar en la implementación del Acuerdo Político de Paz y Reconciliación de 2019.
El máximo representante de Naciones Unidas llamó a todos los actores locales a participar de manera constructiva mediante un diálogo político inclusivo, con miras a lograr avances tangibles en el proceso de paz y reconciliación en la República Centroafricana.
Asimismo, reiteró su compromiso de seguir movilizando a la comunidad internacional para apoyar al Gobierno y al pueblo de la República Centroafricana en su búsqueda de la paz, la reconciliación y el desarrollo.
Los enfrentamientos entre los exrebeldes Seleka (de mayoría musulmana) y los grupos anti-Balaka (cristianos y animistas) sumieron a esa nación africana en un conflicto civil desde el año 2013.
En 2014, se desplegó la misión de la ONU en el territorio conocida como Minusca, una fuerza de paz que trata de contener la violencia desatada allí.
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