De 2007 hasta la fecha, bajo la gestión del presidente Daniel Ortega y posteriormente de la vicemandataria Rosario Murillo, el número de instituciones de ese tipo, dedicadas a los hijos de padres trabajadores, aumentó de 32 a 264 con presencia en los 16 departamentos del país.
Otras cifras significativas resultan los más de 769 mil pequeños menores de seis años incluidos en el programa de Atención a la Primera Infancia, integrados además en los Centros Infantiles Comunitarios y Casas Bases Comunitarias y, hasta 2020, 190 mil niños recobraron su derecho a un nombre y nacionalidad.
Hace poco más de una década la Asamblea Nacional aprobó la Ley 718 o Ley Especial de Protección a las Familias de Partos Múltiples, un proyecto consagrado, en su mayoría, a las adolescentes embarazadas, casos especiales y madres solteras con alumbramientos de más de un bebé.
El plan, con impacto en más de dos mil 600 familias, comprende la entrega de paquetes alimenticios con carácter trimestral, la consejería en valores, crianza y consultas de psicología; así como, capacitaciones laborales en entidades vinculadas al Gobierno.
Los expertos destacan también la participación de 154 mil personas en los procesos de formación en valores para madres, padres y tutores, con el propósito de fortalecer la convivencia familiar, apoyada en elementos como la equidad, igualdad y respeto a los derechos humanos.
El compromiso social con niños y adolescentes de la administración sandinista abarca además la construcción y modernización de parques municipales e instalaciones deportivas y el impulso de propuestas culturales, medioambientales, tecnológicas y comunicativas.
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