Precisó el informe que los precios al consumo crecieron mucho más rápido de lo previsto en octubre y el índice de precios al consumo (IPC), que hace un seguimiento de la inflación de una serie de bienes y servicios básicos, subió un 0,9 por ciento el mes pasado y un 6,2 por ciento en el periodo de 12 meses que finalizó en octubre.
Los expertos consideraban que en general el IPC subiera un 0,5 por ciento el mes pasado, frente a un aumento del 0,4 por ciento en agosto, y un 5,8 por ciento en el último año.
Según el diario The Hill el alza inflacionaria es una señal desalentadora para el presidente Biden y los demócratas, que se enfrentan a una creciente presión, a pesar de la amplia fortaleza de la economía.
La aprobación de Biden cayó constantemente desde la primavera, debido en parte a la creciente reacción política por el aumento de los precios de los alimentos y la gasolina.
Los economistas esperaban que la inflación se mantuviera por encima de los niveles anteriores a la pandemia, mientras la economía se recuperaba hasta la primavera, pero el alza de los precios fue mayor y durante más tiempo de lo que muchos preveían.
Mientras hay temor por la falta de productos en algunos mercados, la Casa Blanca presiona para eliminar los retrasos en los puertos, aumentar la entrega de paquetes, reunir a los trabajadores sindicados y promover la vacunación generalizada contra el Covid-19 para ayudar a aflojar las líneas de suministro.
Este miércoles Biden visitará Baltimore, Maryland, en lo que se considera un esfuerzo para que los electores no pierdan la fe en el gobierno de los demócratas.
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