Según informó este lunes el movimiento ecologista británico, Emma Smart, de 44 años, fue enviada desde la semana pasada a la cárcel de mujeres de Bronzefield, en el suroeste de Inglaterra, y desde entonces se niega a ingerir alimentos.
El comunicado de la organización cita también a la activista, quien asegura que continuará con su huelga hasta que las autoridades de este país se comprometan a mejorar el aislamiento térmico de los hogares británicos.
Dejé de comer en solidaridad con aquellos que tendrán que elegir entre calentarse y alimentarse este invierno debido a la cobardía de nuestro gobierno, aseveró Smart, quien fue sentenciada a cuatro meses de prisión.
El miércoles pasado, nueve miembros de Insulate Britain fueron condenados a entre tres y seis meses de cárcel por desafiar una orden judicial que les prohibía bloquear una transitada autopista alrededor de esta capital.
Otro número similar de activistas deberán comparecer ante el Tribunal Superior de Londres en una fecha próxima para responder por el mismo delito.
El grupo ecologista comenzó a bloquear el tráfico vehicular en la autopista M25 que rodea la capital británica en septiembre pasado, y luego extendió las protestas a otras carreteras importantes de Inglaterra y al centro de Londres.
De acuerdo con Insulate Britain, al menos ocho mil 500 personas mueren cada invierno en el Reino Unido porque las casas carecen de un buen sistema de aislamiento térmico.
El sábado pasado, centenares de personas marcharon en Londres y bloquearon durante varias horas dos puentes sobre el río Támesis en solidaridad con los activistas encarcelados.
Según informó entonces la Policía Metropolitana, 124 manifestantes fueron arrestados y luego liberados bajo investigación.
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