Al mismo tiempo, el congresista Guillermo Bermejo, de la bancada del partido gobernante, Perú Libre, calificó la ofensa al líder indígena boliviano como “una absoluta vergüenza” que llega al extremo de pedir al Gobierno que impida el ingreso de Morales al país e impedir una visita proyectada por él para diciembre próximo.
“Ah, pero si viene el paramilitar (expresidente colombiano) Álvaro Uribe o el corrupto rey (emérito Juan Carlos) de España, le ponen alfombra roja sumisamente”, añadió el destacado legislador.
Una declaración de los legisladores que condenan el agravio de elementos ultraconservadores a Morales y a Bolivia y señalan que el grupo legislativo puede fiscalizar el funcionamiento de la administración pública relacionados con las relaciones internacionales, pero estas son responsabilidad exclusiva del presidente de la República y las realiza la Cancillería.
Añade que los integrantes de la comisión puede pronunciarse sobre los temas que quieran, los acuerdos del grupo no pueden afectar las relaciones de armonía y colaboración con otros países, como Bolivia.
Agrega que el pronunciamiento aprobado “tiene una impropia carga ideológica y discriminatoria contra el expresidente Morales” y anota que cualquier cuestionamiento de los miembros de la comisión sobre un ciudadano extranjero, debe canalizarse a través de la Cancillería.
El documento criticado pide a los ministerios del Interior y Defensa que se encarguen del cumplimiento del pronunciamiento, lo cual los legisladores discrepantes “transgrede flagrantemente nuestro ordenamiento jurídico y constituye un abuso del derecho y del rol fiscalizador del Congreso”.
Morales ha hecho varias visitas a Perú desde su presencia como invitado en la toma de posesión del presidente Pedro Castillo y en todas ha respaldado el programa de cambios del mandatario peruano y ha recibido muestras de gran aprecio de la población.
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