En esta capital, en el punto donde fue impactado, carteles, fotos y pancartas denunciaron el accionar indiscriminado de la fuerza pública que ocasionó la muerte del joven.
«Ni una persona más asesinada, mutilada, abusada sexualmente, golpeada, perseguida o detenida por exigir sus derechos», coreaban en la Calle 19 donde en varias ocasiones pararon el tráfico vehicular.
Una muchacha, que quiso conservar su anonimato, dijo a Prensa Latina que hace dos años un agente del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) le arrebató los sueños a Dilan Cruz cuando se encontraba en medio del Paro Nacional.
Solo exigía un mejor país para él, para su familia y para todos los jóvenes de Colombia mientras los uniformados no respetaron siquiera sus 18 años, enfatizó.
Mojada y titiritando, por el frío y la incesante lluvia del día, aseguró que el Esmad debe desaparecer porque lejos de cuidar la seguridad ciudadana es responsable de decenas de muertes de personas inocentes, particularmente de manifestantes.
«Dos años sin ti, dos años contigo. ¡Dilan Cruz vive!», rezaba una de las pancartas levantada una y otra vez por los manifestantes.
Asimismo, desde el pasado domingo en las redes sociales, cientos de internautas piden justicia en este caso y denuncian la brutalidad policial.
«A esta hora hace dos años, el ESMAD #003478 disparaba a la cabeza de Dilan Cruz. Intentaron justificar el homicidio diciendo que iba agachado y lanzaba rocas; se desmintió. Al día de hoy no hay un solo condenado. ¿De cuál justicia aleccionadora habla el Gobierno de @IvanDuque?», escribió el concejal de Bogotá Diego Cancino.
El 21 de noviembre de 2019, Dilan, fue alcanzado por una recalzada (proyectil de fabricación artesanal) disparada por el capitán del Esmad Manuel Cubillos.
El joven estuvo dos días convaleciente, pero no pudo superar el daño causado y murió en el Hospital San Ignacio de Bogotá.
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