De acuerdo con el diario Global New Light of Myanmar, portavoz de la junta gobernante, los arrestos estuvieron focalizados en grupos ilegales opuestos al gobierno de facto instaurado el pasado 1 de febrero.
Durante el operativo realizado el lunes en una iglesia en Loikaw, en el estado oriental de Kayah, fueron descubiertos 48 pacientes que estaban recibiendo tratamiento, siete de los cuales padecían Covid-19.
Según la fuente, se trata de «personas heridas y pacientes de las organizaciones terroristas», aunque no nombró a las organizaciones.
El cotidiano añadió que los 18 trabajadores de la salud (cuatro doctores, cuatro enfermeras y 10 auxiliares de enfermería) arrestados serían tratados de acuerdo con la ley.
Algunos de ellos habían sido previamente acusados de incitación por su negativa a trabajar después del Golpe de Estado de febrero, según el informe.
El sector es uno de los protagonistas de la resistencia contra la junta al negarse a trabajar buena parte de su personal.
Los militares tomaron el poder en Myanmar por la vía violenta el 1 de febrero, alegando irregularidades en las elecciones generales de noviembre de 2020, algo desestimado por las autoridades electorales y la opinión pública mundial.
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