Fue una novela escandalosa en su momento por su contenido erótico, pero el cineasta Bigas Lunas se encargó de colocarla en un pedestal diferente, si cabía esa posibilidad, con una película que ganó un premio Goya (María Barranco por su papel de reparto) y fue protagonizada por la italiana Francesca Neri y el español Javier Bardem.
Se trataba de la historia del recorrido erótico de Lulú desde sus 15 a sus 30 años, y que marcó la carrera de Grandes, quien, sin embargo, hizo luego variaciones en su rumbo y hasta se adentró en la literatura infantil.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, la calificó como «una de las principales escritoras de nuestro tiempo».
«Perdemos a una de las escritoras referentes de nuestro tiempo. Comprometida y valiente, que ha narrado nuestra historia reciente desde una mirada progresista», destacó Sánchez en su cuenta de Twitter.
Reconocida con el Premio Sonrisa Vertical de literatura erótica, publicó en 1991 su segunda novela, Te llamaré viernes.
Después vendría la segunda incursión en el cine de sus obras, en 1994, con Malena es un nombre de tango, otro éxito literario, una versión llevada al séptimo arte por otro director español, Gerardo Herrero.
Incursionó en trabajos a partir de la admiración que sentía por Benito Pérez Galdós y además en la literatura infantil, con ¡Adiós Martínez!.
Además, participó en el texto colectivo Érase una vez la paz (1996), cuyos fondos fueron destinados a los niños víctimas de las guerras de Ruanda y Mozambique.
Fue en realidad una escritora muy prolífica con numerosos libros.
Grandes, nacida en Madrid, murió este sábado a los 61 años a consecuencia de un cáncer.
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