En presentación televisada, el mandatario explicó que hay varias preocupaciones sobre la nueva variante, y todavía no hay seguridad de cómo se comportará en el futuro.
Sin embargo, acotó, ya tenemos las herramientas que necesitamos para protegernos contra ella, reducir la transmisión y para protegernos contra enfermedades graves y la muerte.
Entre otras medidas correspondientes al Nivel de Alerta 1, recordó Ramaphosa, se deben cambiar a formatos virtuales aquellas reuniones masivas que requieren de un gran número de personas en estrecho contacto durante períodos prolongados.
Pero, enfatizó, la primera y más poderosa herramienta que tenemos es la vacunación.
Al tomar la decisión de no imponer más restricciones en esta etapa, reveló, consideramos el hecho de que cuando nos encontramos con oleadas anteriores de la infección, las vacunas no estaban ampliamente disponibles en Sudáfrica.
No obstante, agregó, ese ya no es el caso.
Desde que las primeras vacunas antiCovid-19 estuvieron disponibles a fines del año pasado, recordó, hemos visto cómo éstas han reducido drásticamente las enfermedades graves, las hospitalizaciones y las muertes en Sudáfrica y en todo el mundo.
Las vacunas funcionan, insistió el presidente al exhortar a los sudafricanos que aun no se han inmunizado, a hacerlo sin demora.
Las vacunas están salvando vidas, reafirmó.
Por lo tanto, hemos estado comprometidos con los interlocutores sociales y otras partes interesadas en la introducción de medidas que hagan de la vacunación una condición para el acceso a lugares de trabajo, eventos públicos, transporte general y establecimientos públicos.
En su intervención, Ramaphosa criticó las prohibiciones de viajes hacia y desde naciones del sur de África, las cuales, dijo, son injustificadas, carecen de base científica y no serán eficaces para prevenir la propagación de esta variante.
Lo único que hará la prohibición de viajar es dañar aun más las economías de los países afectados y socavan su capacidad para responder y recuperarse de la pandemia.
En consecuencia, sostuvo, hacemos un llamado a todos aquellos países que han impuesto prohibiciones de viaje a revertir urgentemente sus decisiones y levantar la prohibición.
Asimismo, exhortamos al mundo a no permitir que continúe la desigualdad en relación con la distribución de las vacunas antiCovid-19.
En lugar de prohibir los viajes, añadió, los países ricos del mundo deben apoyar sin retraso los esfuerzos de economías en desarrollo para acceder y fabricar suficientes dosis de vacunas para su población.
Hasta que todos no estén vacunados, nadie estará libre de riesgos, concluyó.
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