El primer ministro Kishida Fumio explicó que se trata de una disposición de emergencia y temporal, entrará en vigor mañana y busca evitar un empeoramiento de la situación sanitaria del país.
De esa manera, Tokio revirtió la reciente flexibilización a los viajes aquí de estudiantes, empresarios y técnicos de otras nacionalidades, y al mismo tiempo endureció las exigencias de cuarentena para compatriotas llegados de territorios donde ya se detectó la Ómicron.
Las autoridades epidemiológicas investigan el caso de un individuo de Namibia que dio positivo al SARS-CoV-2 y además se mantienen vigilantes por la inquietud desatada tras conocerse sobre la peligrosidad de la nueva variante del coronavirus.
Japón se sumó así a varias naciones del planeta que cortaron los enlaces aéreos, principalmente con África, a raíz del surgimiento de la Ómicron.
Además, este lunes participará en una reunión de los ministros de Salud del Grupo de los Siete, convocados por el gobierno británico, para analizar el riesgo y las medidas a tomar ante esa mutación.
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