De acuerdo con Xu Wenbo, directivo del Centro de Control y Prevención de Enfermedades, todos los inyectables desarrollados aquí actúan en la reducción de casos graves y las muertes entre quienes contraen la patología.
También avaló la utilidad de los dispositivos domésticos para las pruebas PCR y el mecanismo adoptado a fin de detectar cualquier caso y rastrear los contactos cercanos en poco tiempo.
Hasta ahora solo Hong Kong reportó tres individuos infectados con la Ómicron, pero los científicos en China sugieren que lo más prudente es cerciorarse de cumplir de forma estricta con el control y prevención sanitaria en viajeros procedentes de Sudáfrica y los países vecinos.
También insisten a la población en mantener el distanciamiento social, usar mascarillas en público y evitar salir al extranjero.
No obstante, medios de prensa informaron que las farmacéuticas ya trabajan en proyectos para actualizar las vacunas existentes o crear algunas contra la nueva mutación del SARS-CoV-2.
De manera general, China contabiliza al menos cinco mil 697 muertos y 127 mil 814 casos en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la patología y del coronavirus que la provoca en diciembre de 2019.
En los últimos meses reportó frecuentes rebrotes de la enfermedad y ahora enfrenta otro en la localidad fronteriza de Manzhouli, en Mongolia Interior (norte) con medidas como el aislamiento de vecindarios completos, cierre de centros de trabajo, escuelas y comercios.
También se interrumpieron la transportación pública, cenas, bodas y conferencias, además de suspenderse las operaciones en sitios religiosos, funerarias y hospitales.
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