El departamento que se ocupa de esos temas en la Fiscalía bosnia los considera responsables del asesinato de 27 civiles, además de otros crímenes contra la humanidad, informó este martes la agencia de noticias Fena.
Los investigadores sospechan que los expolicías del Ejército de la República Srpska bosnia detuvieron en 1992 y 1993 a cientos de civiles de las aldeas bosniomusulmanas de Ekici y Alici.
Estas personas fueron arrestadas ilegalmente, maltratadas y torturadas en un centro de bomberos de Bosanski Novi, mientras que 27 de ellos fueron llevados a otro lugar de la zona, donde fueron ejecutados, y sus restos mortales tirados a una fosa común, según las acusaciones.
También se sospecha que los nueve exmilitares participaron en 1996 en la exhumación y traslado secreto de los restos mortales de las víctimas, que fueron arrojados a un río cercano con la intención de ocultar pruebas.
Hasta ahora en los alrededores de la fosa común y el río han sido hallados solo los restos mortales de seis víctimas.
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