Esta normativa castiga hasta con 20 años de prisión a quien reproduzca, copie, imite o se apropie de elementos del patrimonio cultural indígena sin autorización del titular o titulares de los derechos de autor.
La minuta fue enviada a la Presidencia de la República para su promulgación en el Diario Oficial de la Federación, y tras un periplo de dos años finalmente se protegen las creaciones artísticas frente a abusos de corporaciones extranjeras, e incluso empresas nacionales, que roban sus diseños y obtienen ganancias millonarias, informó el diario La Jornada.
Esta reforma, aprobada ayer con 98 votos a favor y ninguno en contra, permite a las comunidades afectadas presentar denuncias ante la Fiscalía General de la República y entablar juicios para lograr la indemnización por el uso indebido de su patrimonio cultural.
rgh/dla
