Esta es la segunda granja francesa contaminada por el virus H5N1 este invierno, y se encuentra a unos 20 kilómetros del foco detectado en una explotación de gallinas ponedoras el pasado 26 de noviembre, según señaló el comunicado hecho público.
Para evitar la propagación del virus, se inició el sacrificio de todos los animales, para proceder a desinfectar el lugar, informó la prefectura, al tiempo que se estableció una zona de protección de 3 kilómetros alrededor del foco y otra de vigilancia, en un radio de 10.
Además, “se están investigando otros dos casos sospechosos de gripe aviar en explotaciones situadas en las zonas de vigilancia y protección”, explicaron las autoridades, advirtiendo que “podrían adoptarse nuevas medidas sanitarias en los próximos días”.
A principios de noviembre, Francia elevó a alto el nivel de riesgo de gripe aviar en su territorio y pocos días después la Organización Mundial de Sanidad Animal pidió que se incrementara la vigilancia, tras detectarse numerosos brotes en la fauna silvestre y en varias granjas europeas, especialmente a lo largo del Mar del Norte y el Báltico.
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