En un comunicado de prensa, la entidad de Naciones Unidas remarcó que de esta forma se hace eco de las preocupaciones expresadas por los delegados durante la 24 Asamblea General de la OMT efectuada la semana anterior.
El comentario surge a raíz de la alarma internacional por la detección de una nueva cepa del SARS-CoV-2, ómicron, que a todas luces se encontró por primera vez en Sudáfrica.
Países de todas las regiones del mundo expresaron su solidaridad con los Estados de África meridional y solicitaron el levantamiento inmediato de las prohibiciones de viaje impuestas a determinadas naciones y el respeto por la libertad de los desplazamientos internacionales, indicó la nota.
La máxima autoridad del turismo mundial recordó las recientes declaraciones del secretario general de las Naciones Unidas y del director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la injusticia y la ineficacia de las restricciones generales a los viajes que afectan a la región austral de África.
Estas limitaciones de carácter general pueden además estigmatizar a los países afectados o a regiones enteras, acotó.
La OMT puntualizó que durante su cita en esta capital, los delegados insistieron que en caso necesario, estas restricciones deberían ser proporcionadas, transparentes y científicamente fundamentadas.
“Asimismo, solo se deberían aplicar con la vista puesta en las consecuencias que la interrupción de los viajes internacionales acarrearía para los más vulnerables, en particular para los países en desarrollo y las personas cuyas economías y medios de vida dependen del turismo”, argumentó.
Finalmente, solicitó a la comunidad internacional a actuar de forma solidaria, para garantizar un acceso equitativo y universal a las vacunas, que reconozcan todos los sueros aprobados por la OMS a efectos de viajes internacionales.
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