Los factores socioeconómicos, demográficos, climáticos y de seguridad (en los estados al sur del Sahara) son determinantes para estos movimientos hacia Argelia, estiman los técnicos, según un reporte del encuentro difundido por el cotidiano Al Watan (La Nación, en árabe).
Las autoridades argelinas adoptaron medidas urgentes para enfrentar el fenómeno que representa el flujo de migrantes en situación ilegal, subrayó el delegado del Inesg Abdeljalil Belala.
Entre los problemas creados para los servicios de seguridad por el asentamiento de indocumentados subsaharianos en zonas argelinas, el ponente enumeró el consumo y expendio de narcóticos, falsificación de moneda, prostitución, entre otros delitos.
De su lado, el delegado del Ministerio del Interior calificó la migración ilegal como “una tragedia humana”, y subrayó que entre sus consecuencias más graves está la creación de “villas miseria” aledañas a ciudades rurales argelinas, consideradas un riesgo para la seguridad nacional. Estudios del ente especializado calculan que de entre los 60 mil y 80 mil indocumentados llegados a Túnez, Marruecos y Argelia en los últimos meses, el 80 por ciento se asentó en este país.
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