Según la Agencia de Noticias TAP, los movilizados, los cuales se concentraron en la céntrica Plaza de Túnez, pidieron al gobierno del presidente, Kais Saied, quien se hizo con amplios poderes, que derogue el estado de excepción y la congelación de la Asamblea Nacional por tiempo indefinido, entre otras medidas.
Jawhar Mbarek, uno de los líderes de la iniciativa Ciudadanos contra el Golpe de estado, manifestó que los presentes en la protesta reclamaron el retorno de la legitimidad del parlamento elegido, la defensa de la Constitución y la lucha contra todas las formas de ataque contra la justicia y violación de derechos.
Los reunidos en esta concentración popular también expresaron su oposición a los juicios de civiles ante los tribunales militares y contra la monopolización del poder, además de exigir elecciones presidenciales y legislativas anticipadas, sostuvo.
En virtud de un decreto presidencial, por vez primera este 17 de diciembre en Túnez se celebra el inicio de la Revolución, marcado por la caída en 2011 del régimen del entonces presidente, Zine El Abidine Ben Ali.
Ante fuertes presiones de organizaciones sociales y políticas, el gobernante Saied, exprofesor de derecho constitucional, prorrogó el lunes último la congelación del parlamento hasta la celebración de proyectadas elecciones en diciembre de 2022.
El mandatario en la ocasión anunció además que próximamente se realizará una consulta pública para la redacción de una nueva Constitución, la cual derogará la redactada en 2014.
Según el portal digital Africa News, en el contexto tunecino, marcado por protestas y la pandemia de Covid-19, el problema más acuciante del país es el de la economía, lastrada por una elevada inflación, un 18 por ciento de desempleo y una deuda interna cercana al 100 por ciento del Producto Interno Bruto.
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