La iniciativa, que forma parte de la campaña “Quesos de Europa: En Francia se habla el idioma del amor”, impulsa la exploración de nuevos sabores basados en las recetas tradicionales y ofrece otra visión de la comida local.
En el caso ecuatoriano, platos emblemáticos al estilo del locro de papas, los higos con miel y los patacones de plátano verde experimentan variaciones que encantan al paladar al mezclarlos con quesos como camembert, emmental y brie.
Al decir de los promotores de la iniciativa, hay un estímulo en las sensaciones al establecerse un nexo perfecto que termina en una renovada gastronomía nacional.
“Tenemos alternativas con queso, es parte de nuestra cultura. La combinación eleva la experiencia de sabores. La cocina es un lienzo en blanco donde podemos crear sin límites”, aseguró al respecto el chef de esta nación sudamericana Felipe Rivadeneira, designado embajador de la campaña.
El proyecto estimula el desarrollo de una fase creativa, que despertó interés en millones de hogares a nivel mundial a raíz de la pandemia de la Covid-19, responsable de un largo confinamiento.
Fusionar sabores únicos, uniendo dos mundos sobre la base del amor por la cocina, es el objetivo de ese encuentro andino-europeo, que también llegó a otros países sudamericanos como Colombia y Perú.
La invitación está hecha para que los amantes del queso jueguen en el universo culinario desde lo autóctono, pero con ingredientes que, como dicen los expertos, provoquen una inolvidable explosión de sabores.
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(Tomado de Orbe)
