En su reporte ante el Consejo de Seguridad, el alto funcionario apuntó que todas las partes en conflicto han enfrentado un estancamiento estratégico sobre el terreno durante los últimos 21 meses.
A su entender, esto deja claro que ningún actor o grupo de actores existente puede determinar el resultado del conflicto y que la solución militar no es una opción.
Por su parte, el coordinador de ayuda de emergencia de la ONU, Martin Griffiths, informó al Consejo de Seguridad que en el noroeste de Siria el sistema humanitario del organismo mutlilateral impulsa esfuerzos para proporcionar ayuda entre líneas de frente.
Pero agregó que en este punto, las entregas de ayuda entre líneas no pueden reemplazar la operación humanitaria transfronteriza.
Asimismo, Griffiths se refirió a las grandes necesidades humanitarias en la nación árabe y cómo la financiación para brindar asistencia se ha reducido.
El Comité Constitucional que se reúne en Ginebra está a cargo de redactar la nueva carta magna de Siria y es considerado por la ONU como el primer paso político para la solución del conflicto en la nación levantina.
Irán, Rusia y Turquía son los países garantes de este proceso de negociaciones entre el gobierno sirio y la oposición armada, mientras que en calidad de observadores asisten representantes de la ONU, Jordania, Líbano e Iraq.
La agenda de esas reuniones también suele incluir cuestiones relacionadas con medidas de fomento de la confianza -incluidos el intercambio de prisioneros, la liberación de rehenes y la búsqueda de personas desaparecidas- y con la asistencia humanitaria.
Hace unos 10 años estalló el conflicto en Siria, en buena medida como resultado del interés de Occidente y sus aliados regionales de imponer un cambio de régimen y derrocar al presidente Bashar Al Assad.
A solicitud de Damasco, fuerzas militares de Rusia apoyan la lucha contra el terrorismo en ese territorio árabe, en tanto Siria se enfrenta también a la ocupación ilegal de Estados Unidos y Turquía.
La resolución 2254, adoptada por el Consejo de Seguridad de la ONU, destaca la necesidad de una solución política negociada.
También señala que debe respetarse la integridad territorial y soberanía de la nación levantina, y se refiere a la formación del Comité Constitucional.
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