Desde su cuenta oficial en la red social Twitter, el mandatario escribió: “Felicidades a Cuba y particularmente a su amado Camagüey (provincia central) en el 180 aniversario del nacimiento de aquel diamante con alma de beso (como lo definiera el Héroe Nacional José Martí)”.
De igual forma, el jefe de Estado destacó momentos de la vida y obra del conocido como El Mayor, como el rescate en 1871 al entonces brigadier cubano Julio Sanguily (apresado por tropas españolas), el trabajo como jurista y el amor por Amalia Simoni, quien se convertiría en su esposa.
Agramonte fue fundador de la Junta Revolucionaria que organizó las actividades conspirativas en la región de Camagüey y uno de los principales líderes de la guerra de independencia cubana iniciada en 1868 y extendida por 10 años.
Frente a las corrientes anexionistas y reformistas que amenazaban a la voluntad emancipadora, apuntó: “Que nuestro grito sea siempre independencia o muerte, y que cualquier otro sea mirado en lo adelante como un lema de traición”.
El joven insurrecto tuvo una labor protagónica en la Asamblea de Guáimaro, la cual aprobó en 1869 la primera Constitución de la República de Cuba en Armas.
Al caer en combate con 31 años en Jimaguayú, 32 kilómetros al suroeste de la ciudad de Camagüey, Agramonte había dirigido más de 100 acciones militares.
“No creo que en el discurso historiográfico cubano exista otra personalidad más paradigmática -en tanto conjunción de rasgos positivos- que la del Bayardo camagüeyano», escribió la Premio Nacional de Historia Elda Cento.
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