En su edición 27, los lauros están pendientes de una nueva cita, según informa un comunicado difundido en la red social Twitter por la Asociación de Críticos de Retransmisiones Cinematográficas, que agrupa a más de 500 especialistas de este país y Canadá.
«Después de una consideración cuidadosa y conversaciones sinceras con nuestros socios llegamos a la conclusión de que la decisión más prudente y responsable en este momento es posponer la edición 27 de los premios», apunta el texto.
Asimismo, recuerda que originalmente estaban programados para el 9 de enero del próximo año y actualmente analizan nuevas fechas “durante la próxima temporada de premios para organizar la gala anual en persona con la seguridad y la salud de todos como nuestra principal prioridad”.
En esta ocasión, los galardones sustituirían los Globos de Oro, organizados por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood, cuyas bases y estatutos transitan por un proceso de transformaciones tras las acusaciones de corrupción y falta de diversidad.
Tras las denuncias de racismo, corrupción y malas prácticas por parte de sus 86 miembros, la entidad responsable de los premios respondió con una serie de reformas internas al artículo publicado en el diario Los Ángeles Times que expuso sus deficiencias éticas.
Según medios especializados, la política impide la aceptación de prebendas de toda índole extendidas a través de estudios, publicistas, actores, directores u otros asociados con películas y programas de televisión.
Ante ese panorama acordaron también incrementar sus filas teniendo en cuenta a personas de raza negra, una mayor apertura de la entidad, hasta ahora caracterizada por el hermetismo, aumentar el número de afiliados y la participación de los miembros en sesiones formativas sobre diversidad, equidad e inclusión.
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