Las autoridades de Tel Aviv deben detener sus intentos por cambiar la composición demográfica, la estructura institucional y el estado legal del Golán sirio, subrayó en un comunicado el subsecretario de la organización para Palestina y los Territorios Árabes Ocupados, Said Abu Ali.
El funcionario afirmó que todas las medidas israelíes en ese sentido son nulas y carecen de valor.
Abu Ali denunció que la iniciativa es una flagrante violación de los principios del derecho internacional y de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Advirtió también sobre la expansión sin precedentes de los asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén oriental, así como la peligrosa escalada de ataques de los colonos contra los palestinos.
Reafirmamos el carácter árabe del Golán ocupado y el derecho del pueblo sirio a la soberanía sobre ese territorio de conformidad con las normas internacionales, recalcó el funcionario al citar las resoluciones 242, 338 y 497 del Consejo de Seguridad.
Según Tel Aviv, en las Alturas del Golán viven en la actualidad unas 53 mil personas, 27 mil de ellas judías, una cifra que el primer ministro ultraderechista Naftali Bennett quiere duplicar en corto tiempo.
Para ello se destinará mil millones de séqueles (unos 317 millones de dólares), de los cuales 576 millones (183 millones) se utilizarán en la construcción de miles de viviendas en esa zona, ocupada en la guerra de 1967.
En 2019, el entonces presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, reconoció la soberanía israelí sobre ese territorio, lo que significó un cambio radical de la política histórica de Washington sobre el tema y un claro desafío a la comunidad internacional.
Junto a su importancia militar, debido a su elevación, el área también es clave por sus fuentes de agua, en una región donde el líquido es bastante escaso.
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