Diversos sectores de la sociedad, covocados por la central de Trabajadores de Cuba, se dieron cita para reafirmar el respaldo a las máximas instancias del Partido Comunista y al Gobierno, en un país fuertemente asediado por la administración de Estados Unidos.
Para Laura Bacallao, presidenta de la Federación Estudiantil Universitaria en la casa de altos estudios de Camagüey, “a pesar de haber perdido todos gente valiosa por la pandemia de la Covid-19, acá estamos con nuevos retos, y la sociedad ha asumido proyectos que se están legislando para una Cuba mejor en 2022”.
La también estudiante de periodismo se refirió a la confianza de la juventud en las perspectivas de la nación, “con motivaciones que se irán incrementando con el protagonismo de todos”.
Con apenas 19 años, Dariel Domínguez, clavadista ganador en la justa de los Juegos Panamericanos Juveniles recién celebrados en Cali, Colombia, manifestó que “contrariamente a lo que muchos creen el movimiento deportivo en este país está vivo, y se vio, además, en los Juegos Olímpicos donde además sobresalieron los atletas discapacitados”.
Una serie de razones llevan en esta jornada a miles de personas en esta región, ubicada a 540 kilómetros al este de La Habana, a desfilar “por una Cuba más alegre, y una nación que tiene en las mujeres el fruto de oportunidades y sin discriminación”, según la sindicalista Vilma Del Pino.
Aun con la huella de los daños provocados por la Covid-19, en un proceso de reestructuración de la economía, y con nuevas perspectivas, volvieron a este lugar histórico de Camagüey sus habitantes para celebrar un nuevo aniversario de la Revolución cubana, faro y guía de los movimiento políticos de izquierda en Latinoamérica.
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