Dado que países vecinos como China y Corea del Sur expresaron su preocupación por la liberación del agua de la planta Fukushima Daiichi, programada para la primavera de 2023, el plan de acción incluye que la Agencia Internacional de Energía Atómica evalúe la seguridad de la misma para garantizar la transparencia del proceso.
El Gobierno adelantó que también establecerá un fondo con 30 mil millones de yenes (261 millones de dólares) -asignados en el presupuesto suplementario fiscal 2021- para comprar productos del mar cuando la demanda caiga y promover las ventas en línea por parte de los grupos pesqueros.
Durante una reunión sobre el tema, el secretario jefe del gabinete, Hirokazu Matsuno, pidió a los miembros que implementen las medidas de manera rápida y que el mayor número posible de consumidores sea consciente de la seguridad del agua procesada para crear un entorno en el que las personas de las comunidades puedan seguir operando y expandir sus negocios.
El plan de acción se formó cuando el Gobierno decidió en abril pasado permitir que la compañía Tokyo Electric Power liberara agua contaminada, significativamente diluida en el mar en una operación paso a paso.
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