Las acciones se enmarcan en el avance de la quinta ola de contagios y el impacto de la ya dominante mutación Ómicron del coronavirus SARS-CoV-2 en el país, donde la víspera se registró un nuevo récord de casos diarios, con 232 mil, la tercera jornada consecutiva de más de 200 mil infectados.
A partir del 3 de enero, todos los franceses mayores de seis años deberán portar la máscara sanitaria en el transporte público, los establecimientos que acogen a personas, los eventos deportivos, los lugares de culto y otros definidos por las autoridades locales, una medida reservada hasta ahora para los mayores de 11 años.
El Diario Oficial contiene además la prohibición hasta el 23 de enero de la venta y el consumo de alimentos en trenes y la limitación de la presencia hasta dos mil personas en actividades en espacios cerrados y de cinco mil al aire libre, decisiones anunciadas hace varios días por el primer ministro Jean Castex.
La víspera, en su mensaje de fin de año a la nación, el presidente Emmanuel Macron reconoció que vendrán semanas difíciles por la Covid-19, pero mostró confianza en que la pandemia será derrotada en 2022.
Así quiero creerlo junto a ustedes, afirmó en su intervención, en la cual reiteró el llamado a la vacunación como principal arma, con palabras particularmente dedicadas a los cinco millones de franceses que no se han inmunizado.
«Los deberes prevalecen sobre los derechos. Toda Francia cuenta con ustedes», advirtió.
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