El presidente del Partido Comunes, Rodrigo Londoño, hizo un llamado urgente al Ejército de Liberación Nacional (ELN) y a quienes abandonaron el proceso de paz en Colombia para que detengan la guerra en ese territorio.
«Escuchen al pueblo que suplica paz. Insto al Estado a que asuma su responsabilidad, cumpla el Acuerdo de Paz y garantice derechos fundamentales», señaló Londoño por medio de su cuenta en Twitter.
Asimismo, el obispo de esa jurisdicción, monseñor Jaime Abril, en un comunicado manifestó su preocupación ante esos hechos que agudizan la crisis humanitaria y social que por décadas allí se ha vivido.
Lamentó que una vez más sea la población civil la que salga afectada, por lo que expresó su cercanía y solidaridad con ella.
Además, exigió a quienes generan violencia dejar fuera de esas confrontaciones y hostilidades a las comunidades. También exhortó a «serenar los espíritus, pensar con cabeza fría, mirar el bien común y no dejarse llevar por un torbellino de violencia que nunca se sabe qué más consecuencias pueda generar».
El prelado instó al diálogo como camino para superar las diferencias «poniendo como base fundamental la verdad y claridad de los hechos».
Pidió a las autoridades que verifiquen los hechos de lo sucedido y hagan lo necesario para proteger la vida e integridad de la población civil.
Les solicitó establecer planes de contingencia y ayuda humanitaria donde sean necesarios.
El obispo recordó que la Iglesia católica en Arauca, «fiel a sus principios evangélicos, estará siempre dispuesta a colaborar en todo lo que corresponda y sea necesario, con el fin de aportar lo mejor a la superación de los graves hechos actuales y, en general, a la reconciliación y la paz».
Según versiones, el ELN y los exguerrilleros de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia que abandonaron el proceso de paz, siguen disputándose ese territorio a pesar de la presencia de la población civil en Tame, Fortul y Saravena.
El personero de Tame, Juan Carlos Villate, informó a medios locales que se requiere con urgencia la creación de corredores humanitarios seguros para que la población civil salga de los territorios y albergue para más de dos mil personas que buscan escapar de los enfrentamientos.
La Defensoría del Pueblo aseguró que en las últimas horas se reportaron homicidios, amenazas, retenciones ilegales, desplazamientos masivos y riesgo de desplazamiento forzado en municipios de frontera, específicamente en los tres poblados citados.
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