El vocero convocó a mantener los diálogos y señaló que no debería producirse ninguna acción militar alrededor de Ucrania, vengan de donde vengan.
Además, Dujarric expresó una seria preocupación por la situación en ese país y llamó a mantener el diálogo y evitar un estallido de hostilidades.
Damos la bienvenida a los contactos a varios niveles, incluso al más alto, y esperamos que estos continúen, incluso si persisten las tensiones, apuntó.
El próximo 10 de enero se celebrarán en Ginebra las conversaciones entre Rusia y Estados Unidos sobre garantías de seguridad.
La delegación rusa estará encabezada por el viceministro de Relaciones Exteriores, Sergei Ryabkov, y el equipo estadounidense por la subsecretaria de Estado, Wendy Sherman.
Moscú afirmó que buscará garantías de seguridad firmes por parte de Estados Unidos en cuanto a respetar la seguridad de Rusia y exigirán el fin del avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), así como que no se desplieguen sistemas de armas que amenazan las fronteras del país euroasiático.
En tanto, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que estaba dispuesto a imponer sanciones y aumentarían su presencia en Europa con los aliados de la OTAN si Rusia efectúa otras acciones en Ucrania.
Ante la cercanía del encuentro, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, prometió no hacer concesiones unilaterales sin tener en cuenta el equilibrio de intereses.
Por su parte, el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Ryabkov, advirtió que los intentos de las autoridades estadounidenses de utilizar el diálogo como una tapadera para un mayor desarrollo militar de Ucrania conducirán a un inevitable deterioro de la situación.
El Gobierno de Moscú considera como amenazas serias el acercamiento de los efectivos estadounidenses y de la OTAN a las fronteras rusas, su avance hacia el este y la militarización de Ucrania.
Por ello ha manifestado que habrá una respuesta en caso de que no se establezcan compromisos de seguridad inmediatos.
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